La osteoporosis es una enfermedad generalizada del
esqueleto, caracterizada por una masa ósea baja, alteraciones en la
microarquitectura del hueso, un aumento de la fragilidad del mismo y
consecuentemente un mayor riesgo de sufrir fracturas.
Se puede
considerar la osteoporosis como una alteración del remodelado óseo en la que el
recambio óseo es mayor de lo normal y el balance óseo total es negativo. La masa ósea es la cantidad de
hueso que presenta una persona en un momento determinado. Aumenta hasta
aproximadamente los 25-35 años, momento en el que alcanza su máximo valor (pico
de masa ósea).
El
crecimiento máximo de la masa ósea, sin embargo, se sitúa entre los 12 y 18
años y cualquier alteración metabólica que perturbe este proceso repercutirá
sobre el valor máximo. El pico de masa ósea es diferente en hombres y mujeres,
así como también entre personas del mismo sexo. A partir del pico, la masa ósea disminuyendo de manera indolora y asintomática. En las mujeres durante los
primeros años de la menopausia, debido a la disminución de los estrógenos, la
masa ósea se reduce de forma brusca, pero en avanzadas edades la masa ósea de
hombres y mujeres se acaba equiparando. En ciertos individuos y en determinada edad la masa ósea sobrepasa un valor llamado umbral de fractura a
partir del cual el riesgo de sufrir fracturas osteoporóticas aumenta considerablemente.