Ya hemos comentado que la depresión es una enfermedad y, por tanto, se manifestará con una serie de síntomas, que pueden ser de carácter emocional (tristesa. ..), cognitivo o mental (pérdida de interés por las cosas ...), conductual (pocas ganas de hablar o salir con la familia o los amigos ...) o físicos (fatiga, palpitaciones, dolores abdominales ...). La mayor parte de las veces, la depresión acompañará de ansiedad.
No todas las personas deprimidas sufren todos los síntomas. Algunas sufren pocos y otras tienen muchos. La gravedad de los síntomas varía según la persona y también puede variar con el tiempo. Entre los síntomas más comunes o característicos estarían:
Sentirse deprimido, triste o "vacío". Perder las ganas, el interés o el placer por las cosas que normalmente lo hacían sentir feliz o disfrutar, como el sexo, los deportes, ir al cine, leer, escuchar música ... Dificultades para concentrarse y / o para tomar decisiones. Cansancio permanente, falta de energía. Llorar con facilidad. Estar más irritable, "saltar" por cualquier cosa ... Pocas ganas de relacionarse con los demás, tendencia a aislarse. Cambios en el peso: habitualmente se pierde el apetito y se puede perder peso, pero a veces se come con exceso y se aumenta de peso. Problemas para dormir: dificultades para conciliar el sueño, despertarse pronto y no volver a dormirse. Aunque a veces la depresión ocasiona somnolencia y fatiga y la persona deprimida tiende a dormir demasiado. Frecuentes dolores de cabeza, dolores de cuerpo y cualquier otro tipo de dolores en general. Problemas digestivos. Sentimientos de culpa o inutilidad. Sensación de que la vida no vale la pena ser vivida, pensamientos de muerte o suicidio ...
Como se ve, la depresión es mucho más que tener un mal día o levantarse con "mal pie". No es una debilidad personal ni un defecto de personalidad, o flaqueza. Por tanto, no se culpe a sí mismo para sentirse deprimido o experimentar cualquiera de los síntomas que acabamos de describir de depresión. de su alcance (alcohol, medicamentos, armas, etc.) que puedan percibir. Si se produjera una tentativa de suicidio, es muy importante que los familiares no culpabilicen la persona deprimida, ni se culpabilicen ellos mismos.
FUENTE:
Educación
sanitaria para los pacientes que
sufren depresión y para quienes los
rodean
autores:
Josep
M Hernández Anguera
Enric
Aragonès Benaiges