La somatizacion y el transtorno por somatizacion

La somatización se define como la expresión del malestar psíquico a través de quejas corporales que obliga al paciente a solicitar atención médica. Es importante aclarar que no toda queja somática es una somatización, sino sólo aquellas que son valoradas por el paciente como una enfermedad del cuerpo y que, por tanto, le obligan a acudir al sistema sanitario buscando un diagnóstico orgánico y el tratamiento correspondiente.
 
Aunque se ha estimado una prevalencia de quejas somáticas superior al 50% entre la población que demanda atención médica, utilizando criterios operacionales específicos la prevalencia atendida de pacientes somatizadores es del 9,4%. La somatización puede constituir una entidad nosológica por sí misma o, más frecuentemente, puede ser sintomática de otra patología psiquiátrica (Alrededor del 70%), como el trastorno de ansiedad y la depresión.
 
Se considera que la somatización es un factor importante de interferencia en el diagnóstico de los trastornos mentales en atención primaria. En la somatización los síntomas son sentidos y vividos como si fueran reales y no son inventados ni intencionados como en el caso de la simulación. Los pacientes presentan síntomas que atribuyen a un problema orgánico y que responden a problemas psíquicos, psicosociales o eventos estresantes.
 
Son pacientes con dificultad para expresar y vivir las emociones y los sentimientos, y trasladarlos al cuerpo es una forma de ahorrar y tolerar el dolor. Se presentan con un discurso de preocupación,empeñados en dificultar las relaciones personales sin conseguir nada a cambio, por lo que el entorno acaba volviéndose "sordo" a tanta queja, mientras que el paciente continúa atento a su salud.
El inicio de los trastornos por somatización se da generalmente en la adolescencia y, incluso, en la edad infantil pero es frecuente que se presente en adultos jóvenes sobre todo en el sexo femenino. Hay muchos aspectos de aprendizaje y conductuales personales y familiares ante la enfermedad, así como factores culturales, que pueden influir en el inicio de estos cuadros. Es muy importante la detección precoz para evitar la cronificación. Los trastornos somatomorfos incluyen entidades como el trastorno por somatización, el trastorno somatomorfo indiferenciado, el trastorno conversora, el trastorno hipocondríaco, el trastorno dismórfico, el trastorno somatomorfo no especificado y el trastorno de dolor persistente somatomorfo.
 
 
FUENTE:
Recomendaciones para la atención a los problemas de salud mental más frecuentes en la atención primaria de salud. Servicio Catalán de la Salud.