Los trastornos mentales representan el 12% del total de las enfermedades diagnosticadas en Europa. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2020 la depresión será la segunda causa de discapacidad y muerte, o sea, el principal factor de pérdida de salud de la población.
Actualmente se calcula que afecta a más de 25 millones de europeos. Europa invierte 300.000 millones anuales al tratamiento de enfermedades mentales, la depresión lleva casi un 40% del total, el resto se destina a trastornos adictivos, de ansiedad y psicóticos. Concretamente la depresión supone un gasto de 38 millones de euros a diferencia de enfermedades como el cáncer que implican una mayor financiación, 1.500 millones de euros.
Aunque los recursos siguen siendo bajos, las enfermedades mentales no se han considerado nunca un problema grave de salud pública hasta hace poco. La sensibilización y el incremento de las pides ha vuelto a cuestionar si la depresión es o no es un problema de salud pública.
Anualmente, según el economista de la Universidad de Estocolmo, Patrick Sobocki y el informe que ha presentado sobre la repercusión económica de los trastornos afectivos y los gastos de salud pública, el suicidio se sitúa entre una de las diez principales causas de mortalidad en todos los países de la UE, y una de las principales entre las franjas de edad entre los 15 y los 35 años. Los aproximadamente 60.000 casos anuales de suicidio, más del 90% provienen de personas con antecedentes de algún tipo de enfermedad mental, de una depresión, que afecta especialmente al grupo de población entre los 20 y los 40 años, el que contribuye a una pérdida significante de productividad dentro del mercado laboral.
Anualmente, según el economista de la Universidad de Estocolmo, Patrick Sobocki y el informe que ha presentado sobre la repercusión económica de los trastornos afectivos y los gastos de salud pública, el suicidio se sitúa entre una de las diez principales causas de mortalidad en todos los países de la UE, y una de las principales entre las franjas de edad entre los 15 y los 35 años. Los aproximadamente 60.000 casos anuales de suicidio, más del 90% provienen de personas con antecedentes de algún tipo de enfermedad mental, de una depresión, que afecta especialmente al grupo de población entre los 20 y los 40 años, el que contribuye a una pérdida significante de productividad dentro del mercado laboral.
Retos de futuro
1 - Ventajas conllevaría una disminución de los trastornos depresivos. (Impacto personal, calidad de vida, social, educativo, sanitario, judicial ...)2 - Eficacia de las políticas de promoción y prevención. Se cuestiona el modelo de atención sanitaria?3 - Tendencias de futuro. Hacia dónde vamos? (Incremento demandas, mayor y más complejidad de casos, especialización de los equipos, nuevos programas ... etc.)4 - ¿Qué valoración hacemos a la sociedad como facilitadora de recursos, ayudas, información, medios, equipamientos para combatir la enfermedad? Que habrá que mejorar e ir planteando?
FUENTE: Fundación Sanitaria Sant Pere Claver