El
ostomía es el procedimiento quirúrgico mediante el cual se realiza una apertura
llamada estoma en la piel abdominal para evacuar las heces y los gases. En general
se realiza para dejar cicatrizar la anastomosis, o bien porque se ha practicado
una pantoproctocolectomia y por lo tanto ya no hay recto para permitir al
paciente defecar de manera natural.
Entonces
en función del motivo por el que ha llevado a cabo, el ostomía, puede resultar
temporal o definitiva. Existen diferentes tipos de ostomía en función de la
porción del intestino vertida. La consistencia y la frecuencia de las heces
evacuadas dependerán del tipo de ostomía realizada.
Ileostomía:
Se aplica cuando se une el íleon del intestino delgado con la piel abdominal porque
se ha extirpado el colon, el recto y el ano. Las deposiciones suelen ser semilíquidas.
Colostomía
ascendente: Se lleva a cabo sobre el colon ascendente. En este caso el paciente
elimina heces acuosas o semisólidas de manera casi continua.
Colostomía
transversa: Se realiza sobre el colon transverso. Se utiliza con más
frecuencia. Las heces son semisólidas.
frecuencia. Las heces son semisólidas.
Colostomía
descendente: Se practica sobre el colon descendente. Las heces son bastante
consistentes.
Colostomía
porción rectosigmoide: Se lleva a cabo sobre el sigma. Es la más fácil de controlar
porque las heces ya están formadas y sólidas.
El
estoma está formado por una bolsa, una crema protectora cutánea (para evitar
las irritaciones) y una pieza adhesiva que se pega a la piel periostomal para
impedir que la bolsa se despegue aunque se mueva o que se moje. También está
provisto de un filtro que atenúa los olores producidos por la deposición de
heces.
Todo
este material requiere una educación al paciente por parte de un
estomaterapeuta. El paciente debe aprender a ponerse el estoma así como
quitárselo para vaciar la bolsa. También debe cambiar sus hábitos alimenticios,
debe comer alimentos ricos en fibra que permiten un tránsito intestinal
adecuado así como una regularidad en las deposiciones.
El
estomaterapeute o dietista le indicará cuáles son los menús más apropiados a su
ostomía.
Complicaciones
de la ostomía:
Estenosis:
Ocurre cuando el diámetro del ostomía disminuye ligeramente y
entonces se adaptará el adhesivo de la bolsa. Es frecuente durante los tres primeros meses siguientes a la intervención, pero si el estrechamiento del diámetro continúa, puede impedir la expulsión de las heces y entonces hay que volver a operar.
entonces se adaptará el adhesivo de la bolsa. Es frecuente durante los tres primeros meses siguientes a la intervención, pero si el estrechamiento del diámetro continúa, puede impedir la expulsión de las heces y entonces hay que volver a operar.
Retracción:
Tiene lugar cuando el estoma entra hacia dentro del abdomen, provocando que escapen
heces y como consecuencia una irritación de la piel. Para poder volver a igualar
la superficie del abdomen se utilizará una pasta niveladora que, al mismo
tiempo de reestructurar la piel, permite una mejor Adhesión de la bolsa. Si la pasta
no hace efecto, entonces hay que volver a operar.
Hernia:
Se produce cuando la pared abdominal impulsa hacia fuera la ostomía y la piel
que la rodea. Generalmente, hay que volver a operar para suprimir esta hernia.
Irritación
cutánea: Sucede cuando la piel que rodea el estoma entra en contacto con las
heces. Tiene lugar cuando el dispositivo no sella bien el estoma o bien porque
se retira el adhesivo de manera brusca. En general, la irritación deja de ser
cuando se repara la causa.
Tomado de Viridiana
Philibert. El
tratamiento del cáncer de colon