Tratamiento quirurjico y cancer de colon


Procedimientos preoperatorios
En primer lugar, el cirujano debe reunirse con su equipo para decidir qué cirugía se aplicará en función de la historia clínica del paciente y del estado tumoral. Si el cáncer no ha generado metástasis, o ha generado pocas localizadas, la intervención se realiza con finalidad curativa. En caso contrario, se llevará a cabo con finalidad paliativa.

No obstante, siempre se tiene en cuenta el estado general del paciente antes de decidir operar. Si los riesgos superan los beneficios (enfermedad muy desarrollada o paciente en estado débil) se debe descartar la intervención.

Si se opta por la cirugía, el cirujano debe explicar al paciente el tratamiento quirúrgico al que debe someterse, respondiendo a las preguntas planteadas por el paciente y / o sus familiares, indicando los riesgos de muerte así como las complicaciones que pueden surgir como consecuencia de la intervención. En el caso en que esté prevista la creación de un estoma  un estomaterapeuta explica al paciente en qué consiste, así como los cambios que puede conllevar. Si este último (o sus familiares en caso de que el paciente esté incapacitado para decidir) toma la decisión de someterse al tratamiento, debe firmar el consentimiento informado.

Continuación, el paciente es visitado por el anestesista el que le realiza un electrocardiograma para comprobar que su corazón soporte la anestesia general. Dos días antes de ingresar en el hospital el paciente debe seguir una dieta pobre en residuos para evitar que se formen las heces, que podrían impedir una buena visibilidad en el momento de operar.

A la cena previo a la operación el paciente debe hacer una dieta líquida. También debe tomar la medicación que el médico le habrá indicado, normalmente son laxantes y tranquilizantes en caso de que el paciente sufra angustia.

El día del ingreso en el hospital el paciente debe ducharse con un jabón antiséptico y debe tomar una vaso de agua con azúcar, ya que únicamente puede ingerir esta solución para mantener el grado de hidratación y glucosa en la sangre. En el período preoperatorio se realiza una analítica para controlar su estado general.

El paciente también debe recibir medicación para prevenir la formación de trombosis, que se produce cuando se forma un coágulo de sangre en un vaso sanguíneo y es muy grave porque puede causar una parada cardiaca. Justo antes de la operación, la enfermera desinfecta el cuerpo del paciente (y rasura. el abdomen si es necesario), y el transfieren al servicio de anestesia donde se le realiza una doble anestesia: una general y una epidural.

La anestesia general se usa para insensibilizar todo el cuerpo del paciente durante el tiempo de la intervención. La epidural es una anestesia local que se inyecta en la médula espinal para insensibilizar el abdomen y los miembros inferiores, se utiliza para que el paciente no sufra dolor en la reanimación. Una vez anestesiado el paciente, se le transfiere al quirófano donde se le aplica el tratamiento quirúrgico.

Quirófano

La cirugía del cáncer de colon consiste en extirpar el tumor con cualquier otro tejido que pueda ser infiltrado por este mismo. La zona extirpada comprende su drenaje linfático y vascular y unos márgenes de seguridad para garantizar la extirpación total del tumor. Cada intervención suele durar de 2 a 5 horas. Las técnicas operatorias utilizadas dependen sobre todo de la localización del tumor.

Técnicas operatorias:


Hemicolectomía derecha: Se lleva a cabo para tratar el cáncer de colon ascendente y de ángulo hepático. Extirpa la zona tumoral, se seccionan los vasos ileocólicos y se liga la arteria cólica derecha. Luego se restablece la continuidad intestinal realizando una anastomosis ileocólicos que consiste en conectar el colon transverso con el íleon del intestino delgado.

Colectomía transversal: Se practica cuando se extirpar el tumor situado en el colon transverso. Se liga la arteria cólica media y los vasos cólicos medios y se anastomitzar el colon ascendente con el descendente.

Hemicolectomía izquierda: Se practica cuando el tumor que debe extirpar está situado en colon descendente y / o en el ángulo esplénico. Se debe ligar la arteria cólica izquierda y se restablece la continuidad intestinal mediante una anastomosis colosigmoïdal.

Sigmoidectomia: Se realiza cuando se ha de extirpar el tumor del colon sigmoide. Se debe ligar la arteria mesentérica inferior y se restablece la continuidad mediante una anastomosis colorrectal.

Resección anterior alta del recto: Se aplica cuando se debe tratar el cáncer de la unión rectosigmoide. Durante la extirpación de la zona tumoral se ligar la arteria mesentérica inferior. Se restablece la continuidad practicando una anastomosis colorrectal.

Pantoproctocolectomia: Consiste en la extracción completa del colon y del recto. Se ha de ligar la arteria mesentrica superior y se debe realizar una ileostomía que consiste en conectar el intestino delgado con la piel abdominal para poder evacuar las heces.

Polipectomía: Cuando el tumor se encuentra en etapas iniciales o si es un pólipo canceroso, es preferible la extirpación de este mediante el colonoscopio ya que el cirujano no debe realizar ninguna incisión.

Laparoscopia: Consiste en realizar una pequeña incisión e introducir un tubo largo a el abdomen, después se ha insertar un laparoscopio (telescopio conectado a una cámara de vídeo) dentro del tubo y así el cirujano puede visualizar los órganos internos en una pantalla.

Insertan varios tubos para poder extirpar el tumor, el segmento de colon donde está localizado y los ganglios linfáticos cercanos. La ventaja de esta cirugía innovadora es que las incisiones son pequeñas y cicatrizan rápidamente, y en general los pacientes tardan menos tiempo en recuperarse que en la cirugía convencional, pero requiere una gran experiencia por parte del cirujano en este tipo de operaciones.

Tomado de Viridiana Philibert. El tratamiento del cáncer de colon