La composición corporal se refiere
a la distribución del peso corporal en masa ósea, masa muscular y masa grasa. La
cantidad de hueso, músculo y grasa se calcula siguiendo diferentes fórmulas, algunas de las cuales se
realizan en un laboratorio.
En fitness cuando se habla de la
composición corporal se refiere a un equilibrio de porcentajes de los tres
componentes-hueso, músculo y grasa-siguiendo unos cánones de salud.
La composición corporal varía
según la edad y también es diferente en hombres y mujeres.
Cuando hacemos ejercicio físico el
gasto calórico aumenta. La energía la obtenemos de las reservas que hay en el músculo
o el hígado, los hidratos de carbono y las grasas. Las grasas se utilizan como fuente
de energía en actividades de larga duración. Este aumento, acompañado de una dieta
equilibrada hace que el porcentaje de masa grasa disminuya. Por otra parte, si
se realiza ejercicio dirigido a la mejora de la fuerza, la masa muscular aumenta.
En cuanto a la masa ósea, está demostrado que la realización de ejercicio físico
retrasa el proceso natural, paralelo a la edad, de pérdida de densidad al
tejido óseo.
El ejercicio físico y una
alimentación variada y equilibrada contribuyen al mantenimiento de una composición
corporal adecuada.
Para calcular el índice de masa
ósea o muscular necesario instrumental médico o un laboratorio. El índice de
masa corporal (IMC), en cambio, se puede calcular mediante la fórmula:
IMC = peso (kg) / talla (en m) 2