La actividad física adecuada contribuye a mantener el
peso adecuado, aumenta el consumo de glucosa por parte del músculo, mejora la sensibilidad hística a la
insulina y aumenta la absorción de la insulina de los depósitos subcutáneos.
Ante la posibilidad de que el ejercicio físico dé lugar a hipoglucemias, su
planificación a lo largo del día debe ser muy cuidadosa en el diabético tipo 1 o en el insulinotratamiento. Por otra parte, el ejercicio físico aumenta la velocidad de absorción de la insulina.
según la zona de inyección, la absorción es más lenta o más rápida. Por orden de
mayor a menor velocidad de absorción: abdomen, brazo, glúteo y muslo. El ejercicio aeróbico (caminar
por ejemplo) practicado con regularidad es lo más recomendable. En alguna ocasión puede
ser recomendable administrar una cantidad extra de hidratos de carbono de
absorción lenta antes o durante el ejercicio o bien reducir la dosis de insulina.
Se desaconseja la práctica del ejercicio en los siguientes casos:• Diabetes incontrolada.
• Diabetes con complicaciones neurovasculares graves.
• Antecedentes de hemorragia del vítreo.
• Incapacidad para reconocer las hipoglucemias.