Actividad fisica y salud

La actividad física ha pasado a formar parte de la rutina cotidiana de la mayoría de nosotros. Hoy en día es habitual ir al gimnasio un par de veces por semana, salir a correr, a caminar, practicar yoga o hacer una batería de ejercicios de estiramientos para "romper" el ritmo entre semana. Una vez iniciado el hábito, cuesta abandonar la costumbre de salir a hacer actividades físicas, precisamente porque ya percibimos a nivel orgánico los beneficios que se derivan, como por ejemplo:
Beneficios psicológicos inmediatos:
Aumento de la autoestima, de la fuerza personal y de la motivación para emprender nuevos proyectos.
Relajación y mejora de la calidad del sueño: mejora de la regulación hormonal y los neurotransmisores necesarios para poder hacer un buen descanso nocturno.
Reducción del estrés y la ansiedad, mejora de la regulación emocional.
Incremento de la tranquilidad
Mejora del autocuidado y del bienestar personal
Efecto antidepresivo, mejor el estado de ánimo general.
Mejora de los vínculos y de las relaciones sociales.
Favorece el autocontrol.
Mejora el autoconcepto y la imagen corporal.
Beneficios psicológicos a largo plazo
Bienestar general de la persona: mejora en todos los aspectos de la función psicológica.
Mejora de la salud mental: mejora en depresión y la ansiedad.
Mejoras cognitivas: atención, memoria, toma de decisiones... la actividad física regular pospone el declive del sistema nervioso central y mejora el tiempo de reacción.
Capacidad de reacción y control motor: la actividad regular ayuda a prevenir y / o posponer el declive de la capacidad de reacción motora asociado a la edad.
Adquisición de habilidades: mayor facilidad para aprender nuevas habilidades y mejorar las ya adquiridas, independientemente de la edad.
Mejora en las enfermedades psicosomáticas.
Canalizadores emocionales.
El psicólogo deportivo te ayudará a buscar el mejor plan para beneficiarte al máximo de estos aspectos psicológicos, y fomentar que la práctica deportiva facilite generar más energía para poderla dedicar a otras actividades y por el beneficio personal.
Hay que tener en cuenta que es importante dar un aire de continuidad a estas actividades diarias, ya que sin ellas, el cuerpo vuelve al declive habitual. Hay que ser perseverante en la práctica, aunque sea a intensidades más bajas, para aprovechar los beneficios psicológicos o incluso, de ponderarlos!

Competición deportiva
La competitividad es inherente a la práctica deportiva. El deporte de competición se propone la mejora constante de la marca personal o de la marca del equipo, generalmente a través de un programa de entrenamiento más riguroso, con el objetivo único de Guay o de alcanzar el resultado al que aspira.
La competición llega a ser un nexo importante que establece el compromiso entre el deportista y el objetivo. De esta manera, cada vez más, observamos un aumento de la participación en carreras, triatlones, biatlón, maratones, trofeos, campeonatos, torneos... que, sin formar parte del alto rendimiento, generan una gran participación por parte de los deportistas amateurs. Estos deportistas encuentran en la competición una gran motivación para disfrutar deporte a través de la propuesta de nuevos retos.
La competición deportiva puede convertirse al mismo tiempo una verdadera escuela de vida. Así, a través de la práctica deportiva, podemos extraer grandes experiencias y capacidades perfectamente aplicables a otros ámbitos de la vida personal o de nuestra profesión. Los beneficios psicológicos asociados se multipliquen, dando lugar a una extensa lista de propiedades de entre las cuales:
Mejora de la motivación por tu deporte.
Aprendizaje en la organización y gestión de los objetivos para el rendimiento.
La gestión de las emociones y canalización de la ira, la frustración ...
La gestión de los equipos, el trabajo de integración, cooperación y cohesión deportiva ...