Temperamento del niño y depresion

El temperamento y rasgos de personalidad-El temperamento del niño es un factor que se relaciona con la predisposición a desarrollar psicopatologías, mientras que las características del entorno actuarían en el mantenimiento y curso de la psicopatología. (Earls y Jung, 1987. Rutter, 1987). El temperamento del niño tiene que ver en cómo reacciona ante los demás o ante eventos.
 
El temperamento llamado difícil es un factor de riesgo importante para desarrollar alguna psicopatología. Un niño con temperamento difícil se caracteriza por ser muy emocionable, poco sociable, irritable y dependiente de los adultos. Se suele dar con más frecuencia en hijos de padres deprimidos. los niños considerados difíciles tienen más problemas internalizados y externalizados en
especial, cuando viven en un entorno con conflictos familiares. Por eso el tipo de temperamento y características familiares son muy importantes porque pueden actuar como factores de protección o de riesgo, en función de sus características. (Tschann J, Kaiser, Chesney, Alkon, 1996).

La relación entre temperamento y depresión no sólo se da de forma simultánea en el tiempo. Se ha encontrado también una relación entre el temperamento en la edad preescolar y desarrollar diversos problemas psicológicos en la infancia y adolescencia. Por ejemplo, niños y niñas que presentan poco control de su comportamiento, tienen más adelante problemas externalizados como la hiperactividad, déficit de atención, conducta antisocial y trastorno de conducta en la adolescencia (Caspio, Henru, McGee, Moffit, 1995).
 
El temperamento parece más estable en los niños que en las niñas. En las niñas se suele dar más cambios positivos. Maziade, Côté, Bernier, Boutin y Mriege, (1989) estudian la persistencia o cambio en el temperamento de los 4/8 meses a los 4 años. Los cambios en el temperamento son más evidentes en familias con alto nivel de comunicación, siendo muy importante el estado emocional de la madre (Maziade et al., 1989). En el mismo estudio se observa que el 65% de los niños que tienen un temperamento difícil desarrollan trastornos clínicos. Además el riesgo aumenta cuando la familia es controladora y en función del estado de ánimo de la madre.
 
FUENTE:
ESTUDIO EPIDEMIOLÓGICO DE LA DEPRESIÓN MAYOR EN NIÑOS DE 3-6 AÑOS. Ester Plan y Colomer. 2003