La
cetosis se produce cuando en el organismo de la persona con diabetes hay una falta
importante de insulina, causada por dosis insuficientes o por enfermedad
intercurrente que hace aumentar las necesidades de insulina.
Esto
provoca que la glucosa, que es el carburante de elección, no pueda penetrar
dentro de las células. No hay que olvidar que la insulina es la llave que abre la puerta de las células y permite el paso de la glucosa
(azúcar) en su interior y, posteriormente, su combustión para producir energía.
Por tanto, la cetosis es, junto con la hipoglucemia, una complicación aguda importante que pueden sufrir las personas con diabetes. Afortunadamente, cada vez es menos frecuente desde que la práctica del autoanálisis facilita el buen control de la diabetes.
Por tanto, la cetosis es, junto con la hipoglucemia, una complicación aguda importante que pueden sufrir las personas con diabetes. Afortunadamente, cada vez es menos frecuente desde que la práctica del autoanálisis facilita el buen control de la diabetes.
En una
primera fase, hay falta de carburante en el interior de las células debido de
la imposibilidad de que la glucosa pueda penetrar por la falta de insulina.
Como consecuencia, se produce un aumento de los niveles de glucosa en la sangre
(hiperglucemia), que se elimina en grandes cantidades por la orina (glucosuria
intensa).
Se
tienen muchas ganas de orinar (poliuria) por el aumento del volumen de la orina
y también se tiene mucha sed (Polidipsia) para la deshidratación progresiva
debida a la gran cantidad de agua y sales que se eliminan con las micciones.
Las causas fundamentales de esta descompensación aguda son:
Las causas fundamentales de esta descompensación aguda son:
Se
dejan de practicar los análisis diarios de glucemia confiando en que siempre se
necesitan las mismas dosis de insulina. Este es un error grave ya que las dosis
pueden variar según el ritmo de vida (curso escolar, vacaciones), el ejercicio,
el nerviosismo, el crecimiento, etc. Por lo tanto, se va acumulando una
deficiencia progresiva de insulina que, finalmente, desemboca en los primeros
signos de cetosis.
Cuando
se inicia una enfermedad con fiebre, el organismo requiere más insulina, si no aumenta
la dosis para compensar el aumento de las necesidades, el cuerpo sufre una falta
grave de insulina que desemboca en la cetosis.
Si la alimentación no aporta la cantidad suficiente de hidratos de carbono, el organismo utiliza las grasas. Cuando esta es la causa de la cetosis, la glucosa en la sangre es baja y la glucosa en la orina es negativa.
Si la cetosis es debida a déficit de hidratos de carbono, se resuelve
modificando la alimentación de manera adecuada, habitualmente incrementando el
aporte de fruta.Si la alimentación no aporta la cantidad suficiente de hidratos de carbono, el organismo utiliza las grasas. Cuando esta es la causa de la cetosis, la glucosa en la sangre es baja y la glucosa en la orina es negativa.
Cuando
la cetonuria es intensa y la glucemia es elevada, nos encontramos ante la cetosis
por déficit de insulina. La administración de insulina rápida es urgente para
corregir esta deficiencia.
Por
ejemplo: Si la cetosis se detecta por la mañana, y se está siguiendo la pauta
de insulina rápida (IR) + NPH, dos veces al día, se debe aumentar la insulina rápida de la mañana en un 50% y administrar la misma dosis de insulina NPH.
Cada 4
horas se realizarán controles de glucemia y administrar un suplemento de
insulina rápida que se repite hasta que la glucemia sea aceptable (<200 mg /
dl). Si se utiliza un análogo de insulina rápida (Lispro), hay que hacer los
controles y repetir la dosis cada 2 horas hasta alcanzar niveles de glucemia
aceptables. Aun así, puede persistir aún una discreta cetonuria ya que la
acetona tarda en eliminarse.